– Siempre acompañados. No se permite dejarlos solos en la habitación para evitar que se sientan tristes, ladren y molesten a los demás huéspedes. También en las zonas comunes del alojamiento para prevenir contratiempos.
– NO deben dormir en las camas.
– Identificados. Con el propósito de que no se pierdan, recomendamos que las mascotas lleven una placa identificativa en las zonas comunes.
– Siempre con correa. No todos los animales se llevan bien entre sí. Por eso, para evitar posibles altercados, aconsejamos llevarlos atados cuando están fuera de la habitación. Además, es una manera de asegurar que no se escapen.
– Vacunados y desparasitados. Para cumplir con las normas higiénicas y sanitarias es de obligado cumplimiento que los peludos tengan todas las vacunas al día y estén libres de parásitos.
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